16 años separan una foto de la otra. 16 años repletos de sueños, anécdotas, aprendizajes y vivencias. Recuerdos. Hace 16 años, Kimba se encargó de enseñarme que el amor ilimitado e incondicional no se establece sólo entre personas, sino también entre éstas y los animales. Ya desde pequeña conviví con patos, hámsters, pollos, peces, pájaros, gusanos de seda e incluso grillos, pero fue ella quien me descubrió un sentimiento nuevo. Un sentimiento que, una vez se apoderó de mí, no ha hecho más que crecer.
Hace 16 años, kimba descubrió la playa por primera vez. Fue en la playa de Melides donde se dio sus primeros chapuzones, retozó en la fina arena, corrió tras un frisbee o ladró a las olas que amenazaban con mojarla. Así quisimos retratarla en la foto, pero con tan sólo 4 meses era tan revoltosa que mi hermana y yo tuvimos que sujetarla.
16 años después de esa primera foto, Eco, el miembro más joven de la familia conocía la playa. La misma playa que viera disfrutar a Kimba en su día. Mi hermana, 16 años más vieja :D, y con un corazón capaz de amar, como ella nos enseñó, 16 veces más, no podía dejar pasar la ocasión para fotografiar ya no sólo un precioso atardecer, sino también recuerdos.16 años han pasado ya...
Qué fotos más bonitas!
ResponderEliminarAsí como seguro son los recuerdos que puedes tener de estos 16 años atrás.
La playa de Melides es un sitio con encanto.
Beso
ESPIRAL, ni aunque viviera 100 años sería capaz de relatar con los detalles y el sentimiento que se merecen la cantidad de recuerdos que se agolpan en mi memoria...
ResponderEliminarMe alegro de que conozcas Melides; tiene unos preciosos atardeceres, aunque el baño es demasiado frío!
Besos!
¿Qué rápido parecen que han pasado 16 años verdad? Y echamos la vista atrás y nuestros recuerdos podían escribir un libro. Lo bueno de estos libros, es que estén repletos de historias felices y estas fotografías distantes en el tiempo, lo son.
ResponderEliminarUn besote.
LUISMI, el tiempo vuela!! Menos mal que nos quedan los recuerdos para saborearlos tantas veces como acudamos a ellos (y sin acudir también).
ResponderEliminarAfortunadamente, los buenos superan con creces a los que no lo son tanto. Y estos dos amores caninos son responsables de muchos de ellos.
Un beso enorme!
Que hermosa línea de tiempo, creo que poder regresar a ciertos lugares y repetir los "rituales" antes hechos es un privilegio y un alimento para el alma.
ResponderEliminarUn abrazo.
16 años, y solo cambian un poco las caras, los lugares acordados, y pequeños detalles más...
ResponderEliminarel sentimiento se sale por las lineas de tu texto, y eso no cambia en 16 años, ni en toda una vida.
un beso enorme
Los años pasará, la vida viene y va... Y el tiempo no perdona. De esto trata este juego amiga mía, habrá que seguir jugando. Besos y mordiscos.
ResponderEliminarLUIS, este pequeño ritual que se creó por casualidad creo que se convertirá en práctica común. Un pequeño gesto que abriga el corazón...
ResponderEliminarUn abrazo
SUSO, si es que no se puede ser tan "sentía", que luego se sufre una barbaridad! pero me da la sensación de que es una enfermedad que no tiene cura... :)
ResponderEliminarUn besazo enorme!
MIGUEL, una jugada más que arriesgada y trágica en ocasiones, qué te voy a contar.Malditas las reglas que no nos permiten detener ese tiempo, cambiar el sentido de las agujas del reloj y modificar la partida; aunque entonces ya no sería el mismo juego... pero, ¿alguien nos ha preguntado?
ResponderEliminarUn besito!
Hermosas fotos y lo que traslucen...mucho amor y mucha vida...Kimba (como en mi caso Negri o Wanda o el viejo Teddy) te ha enseñado y te ha dado mucho ... pero Eco tambien os dara muchas alegrias y mucho amor...la vida sigue y nosotros con ella y hermoso y necesario echar la vista atras..hay quien dice que no...que hay que mitrar siempre hcia adelante ...yo no lo creo...mirar atras es a veces doloroso pero siempre hermoso.Por cienrto (y saliendome del comentario) me gusta como pinta Esther....si estuviera por aqui la pillaba para la asociacion cultural..jejeje...Besos,hermanita
ResponderEliminarALFONSO, erróneamente o no, concibo la vida como un gran libro: vamos pasando las páginas, avanzando hacia un insalvable final; pero en ese trayecto, podemos permitirnos volver a las páginas anteriores, recordar instantes y situaciones, sensaciones y personas, pese a que luego debamos continuar por donde dejamos el marcapáginas...
ResponderEliminarHace poco leí una reflexión que me encantó de Susanna Tamaro:
"¿Qué es un animal? en el menosprecio del uso común, se olvida demasiado fácilmente la esencia de ese término. Ánima. Sí, el animal es alguien que tiene ánima, alma. No resulta tan evidente que se pueda decir lo mismo de la mayor parte de los seres humanos".
Ya le hago llegar a mi hermana ese comentario tuyo que le va a animar a no parar de crearrrrr!!!jeje.
Un beso enorme!
Qué preciosidad. Todo. De verdad.
ResponderEliminarGracias, COCO. Me alegra que te guste!
ResponderEliminarHola!!!MUY BONITO Y LAS FOTOS PRECIOSAS.
ResponderEliminarSE PUEDE QUERER MUCHO A UN ANIMAL, YO TENGO PERROS Y GATOS Y A TODOS LOS ADORO, INCLUSO A LOS QUE YA NO ESTÁN CONMIGO Y SE LES ECHA MUCHO DE MENOS, SALUDOS
YOLANDA
Hola Yolanda! Me alegro de que compartamos esta pasión y cariño por los animales, pues es mucho más lo que nos aportan que lo que les ofrecemos. Y, por supuesto, jamás se olvidan.
ResponderEliminarSaludos!